Cuando pensamos en los daños del tabaco, solemos enfocarnos en quienes lo consumen directamente. Pero, ¿qué pasa con los niños que conviven con personas fumadoras? Lo que muchas familias no saben es que el humo del cigarrillo puede ser igual o incluso más perjudicial para los más pequeños, incluso si ellos no lo fuman.
En este artículo te explicamos cómo afecta el tabaco a la salud de tu hijo, qué es el humo de segunda y tercera mano, y cómo actuar para protegerlo de sus consecuencias.
Hay tres formas en las que un niño puede estar expuesto al tabaco:
Conoce más sobre los peligros del humo de tercera mano en ambientes cerrados
¿Qué efectos tiene el humo del tabaco en los niños?
Los niños son especialmente vulnerables al humo del cigarrillo porque:
La exposición pasiva al humo puede provocar:
¿Notas que tu hijo tose constantemente o tiene flema sin razón clara? Puede estar expuesto a humo de cigarrillo. Agenda una consulta con la Dra. Carolina Toro para evaluar su salud respiratoria .
¿Y si fumo fuera de casa o en el balcón?
Es un mito pensar que fumar en otra habitación o en un espacio abierto elimina el riesgo para los niños. El humo del cigarrillo se dispersa fácilmente y las partículas contaminantes pueden adherirse a la ropa, el pelo, los muebles, y luego ser inhaladas por los pequeños.
Además, el humo de tercera mano puede permanecer en superficies por días o incluso semanas. Esto quiere decir que aunque fumes cuando tu hijo no está presente, igual lo estás exponiendo.
El tabaco también afecta a los bebés desde antes de nacer. La exposición durante el embarazo se relaciona con:
Durante la lactancia, si la madre fuma o está expuesta, las toxinas pueden pasar a la leche materna y afectar el sistema inmunológico del bebé. Además de los efectos en el bebé, la exposición prenatal al tabaco se asocia con mayor riesgo de asma y enfermedades alérgicas en la infancia.
Aquí algunas acciones urgentes y efectivas para proteger a tu hijo:
Si tu hijo presenta síntomas respiratorios frecuentes como tos, secreción nasal, estornudos, dificultad, para respirar entre otros. y hay antecedentes de exposición al tabaco en casa, es muy importante consultar con un alergólogo o neumólogo pediátrico.
El especialista podrá:
La exposición al humo del tabaco es una causa silenciosa pero poderosa de enfermedades infantiles. No basta con “fumar afuera” o “cuando el niño no está”; el riesgo persiste mientras el entorno esté contaminado.
Consulta con la Dra. Carolina Toro para valorar el impacto del tabaco en la salud de tu hijo y recibir orientación profesional sobre cómo protegerlo. Un ambiente libre de humo es más que una elección: es una herramienta vital para su bienestar.
Agenda tu cita hoy y da el primer paso hacia una vida más sana para toda la familia.