Durante muchos años, se recomendaba retrasar la introducción de alimentos potencialmente alergénicos en la dieta de los bebés para “evitar” alergias. Sin embargo, estudios recientes han demostrado que presentar ciertos alimentos de forma temprana y controlada puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar alergias alimentarias.

En este artículo explicaremos por qué, cuándo y cómo hacerlo de manera segura, siempre bajo la supervisión de un especialista.

¿Qué son los alimentos alergénicos?

Los alimentos alergénicos son aquellos que con mayor frecuencia provocan reacciones alérgicas. Entre los más comunes se encuentran:

• Huevo
  
• Leche de vaca (a través de alimentos procesados como yogur, queso o productos horneados; no se recomienda dar leche entera antes del año de vida)
  
• Maní y frutos secos
  
• Pescado y mariscos
  
• Trigo
  
• Soya
  
• Sésamo (ajonjolí)
  

Estos alimentos pueden causar reacciones en personas predispuestas, pero no todos los bebés desarrollarán alergia. La clave está en el momento y la forma en que se introducen.

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¿Por qué la introducción temprana puede prevenir alergias?

La evidencia científica ha cambiado las recomendaciones. Investigaciones como el estudio LEAP (Learning Early About Peanut Allergy) mostraron que la introducción temprana de maní en bebés con alto riesgo redujo la incidencia de alergia hasta en un 80%.

Esto se debe a que el sistema inmunológico del bebé, en los primeros meses de vida, puede aprender a reconocer estos alimentos como seguros, reduciendo la probabilidad de que, en el futuro, los identifique como “enemigos” y genere una reacción alérgica.

¿Cuándo es el momento ideal para introducir alimentos alergénicos?

La mayoría de las guías pediátricas y de alergología recomiendan:

• Iniciar la alimentación complementaria entre los 4 y 6 meses de edad, cuando el bebé muestre signos de estar listo (capacidad para mantenerse sentado con apoyo, interés por la comida, coordinación ojo-mano, etc).
  
• Ofrecer los alimentos alergénicos en pequeñas cantidades, uno a la vez, observando posibles reacciones.
  
• En bebés con mayor riesgo (eccema moderado a severo, alergia alimentaria previa o antecedentes familiares de alergia), la introducción debe estar guiada por un especialista.
  

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¿Cómo introducir alimentos alergénicos de forma segura?

1. Comienza en casa y en horario de día para poder observar al bebé (no se recomienda hacerlo en la noche) .
   
2. Introduce un solo alimento nuevo a la vez y espera al menos 2-3 días antes de ofrecer otro.
   
3. Preséntalo en pequeñas cantidades y en una textura adecuada para la edad (puré, papilla, mezclado en alimentos seguros).
   
4. Observa signos como ronchas, vómito, hinchazón o dificultad para respirar.
   
   1. Ante síntomas leves (ronchas escasas, vómito leve, enrojecimiento, entre otras) suspende el alimento y consulta con tu pediatra alergóloga.
      
   2. Ante síntomas graves (dificultad para respirar, hinchazón de alguna parte del cuerpo, decaimiento, vómito o diarrea intensa, etc) acude inmediatamente a urgencias.
      
5. Si no hay reacción, mantén el alimento en la dieta de forma regular para favorecer la tolerancia.

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Mitos comunes sobre la introducción de alimentos alergénicos

• “Es mejor esperar al año para dar huevo, maní o pescado”: No, esperar demasiado puede aumentar el riesgo de alergia.
  
• “Si tengo alergia, mi hijo también la tendrá”: No siempre. Existe predisposición genética, pero no todos los niños desarrollarán alergia.
• “Con darle una vez es suficiente”: No. La exposición debe ser repetida y regular para mantener la tolerancia.
  

¿Qué hacer si hay antecedentes familiares de alergia?

Si el bebé tiene alto riesgo (eccema moderado o severo, alergia alimentaria previa, o madre/padre/hermanos con alergia alimentaria, eccema o asma), la introducción debe ser aún más cuidadosa:

• Consulta con un alergólogo antes de empezar.
  
• En casos seleccionados se podría recomendar pruebas cutáneas o de sangre antes de ofrecer ciertos alimentos.

Conclusión: La prevención comienza desde el primer bocado

La introducción temprana y segura de alimentos alergénicos es una herramienta poderosa para reducir el riesgo de alergias alimentarias y promover una dieta variada desde el inicio de la alimentación complementaria.

Consulta con la Dra. Carolina Toro para diseñar un plan personalizado que proteja la salud de tu bebé y te brinde tranquilidad. Con la orientación adecuada, cada comida puede ser un paso hacia un futuro más saludable.